Los juegos basados en Telegram de tap-to-earn han surgido como principales contendientes en el mundo cripto en 2024. Hamster Kombat alcanzó 300 millones de jugadores antes de un reciente AirDrop, mientras que Notcoin se lanzó con una valoración de mercado de casi 3 mil millones de dólares. Estos juegos se destacan por permitir a los usuarios ganar criptomonedas a través de simples toques en la pantalla.
Aumento de la Popularidad del Modelo Tap-to-Earn
El mecanismo de tap-to-earn es un concepto sencillo que está ganando popularidad a través de varias iteraciones y combinaciones. Sin embargo, si este modelo supera con éxito los problemas enfrentados por los juegos play-to-earn anteriores o enfrentará críticas similares, sigue siendo incierto.
Sostenibilidad Económica y Participación del Usuario
Mientras que los modelos play-to-earn requieren una inversión inicial de los jugadores, los juegos tap-to-earn apuntan a una base de usuarios más amplia al eliminar este requisito. Esto reduce significativamente la barrera de entrada para los recién llegados al espacio de las criptomonedas.
Robbie Ferguson, CEO de Immutable, comentó que “los juegos tap-to-earn representan un avance prometedor sobre los modelos tradicionales de play-to-earn debido a su simplicidad y accesibilidad.” Alena Shmalko, líder del ecosistema en The TON Foundation, señaló, “Si el tap-to-earn no logra crear nuevos modelos económicos, puede enfrentar el mismo destino que los modelos play-to-earn.”
Si bien los juegos tap-to-earn permiten a los usuarios ganar criptomonedas jugando en sus teléfonos, enfrentan limitaciones en profundidad y complejidad. Andrew Saunders, jefe de marketing y crecimiento en Skale Labs, expresó preocupaciones de que estos juegos luchan por mantener el compromiso del usuario a largo plazo.
Notablemente, los modelos tap-to-earn dependen de los ingresos por publicidad para sus estructuras económicas, lo que podría ser un paso crucial hacia la sostenibilidad. Juegos como Notcoin y Hamster Kombat están desarrollando varias estrategias para expandir sus ecosistemas y retener a los usuarios.
En conclusión, los juegos tap-to-earn representan una nueva tendencia en la industria de los juegos cripto. Su naturaleza amigable para el usuario y bajas barreras de entrada ofrecen el potencial de llegar a audiencias más amplias. Sin embargo, quedan preguntas sobre su sostenibilidad a largo plazo y su capacidad para abordar los desafíos enfrentados por los modelos play-to-earn.