Fidelity, un gigante en servicios financieros, sugiere en su último análisis que una posible ola de inflación en 2025 podría beneficiar a Bitcoin. El director de investigación de la compañía, Chris Kuiper, destaca que la inflación persistente y los déficits fiscales podrían empujar a EE. UU. a un escenario de estanflación, caracterizado por un crecimiento económico estancado junto con alta inflación y desempleo.
Predicciones de Bitcoin para 2025
En su informe, Kuiper enfatiza que el rendimiento de Bitcoin variará dependiendo de cómo las instituciones financieras y monetarias respondan a la estanflación. Si se enfocan en combatir la recesión, Bitcoin podría tener un buen desempeño. Sin embargo, si controlar la inflación se convierte en la prioridad, podría enfrentar desafíos significativos.
“Si las autoridades financieras y monetarias eligen abordar el problema de la ‘estancación’ con un aumento del gasto o instrumentos monetarios, Bitcoin podría potencialmente tener un buen desempeño, pero probablemente con algunos retrasos.”
Kuiper recuerda que durante la segunda ola de inflación en los años 70 y 80, el oro se apreció significativamente en valor. Cree que independientemente del entorno macroeconómico en el futuro, Bitcoin podría seguir proporcionando beneficios en varios escenarios económicos.
“Aunque no podemos predecir cómo será el entorno macroeconómico en 2025, creemos que Bitcoin seguirá añadiendo valor a las carteras en diferentes escenarios económicos.”
Escenarios Potenciales
Kuiper afirma que si ocurre una recesión, las tendencias históricas sugieren que se introducirán más estímulos monetarios y fiscales, lo cual ha sido tradicionalmente favorable para Bitcoin. Además, si los activos de riesgo continúan ganando valor y la inflación se mantiene por encima del objetivo del 2%, es probable que Bitcoin tenga un buen desempeño.
“Si los activos de riesgo continúan apreciándose y la inflación se mantiene por encima del objetivo del 2%, es probable que Bitcoin tenga un buen desempeño.”
Sin embargo, fuertes caídas en el gasto fiscal y una desaceleración o reversión en la oferta monetaria podrían llevar a obstáculos significativos para Bitcoin. No obstante, debido a los altos déficits estructurales y un sistema monetario fuertemente endeudado, este peor escenario se considera menos probable. El análisis de Fidelity indica que la potencial ola de inflación en 2025 presenta tanto oportunidades como desafíos para Bitcoin, con la política económica jugando un papel crucial en la determinación de su rendimiento.