Recientemente, la emoción en los mercados bursátiles de EE. UU. se ha transformado en inquietud. Ha pasado más de un mes desde que el S&P 500 alcanzó su punto máximo, y la tendencia del índice se está volviendo cada vez más negativa debido al deterioro del sentimiento de los inversores. Las incertidumbres macroeconómicas están sofocando el apetito por el riesgo, mientras que los principales fondos están enfrentando pérdidas significativas durante este período. Los mercados globales y el mercado de criptomonedas están enfocándose en posibles nuevos aranceles que se implementarán el 2 de abril, junto con las políticas monetarias de la Reserva Federal.
Los Principales Fondos Macro Encuentran Pérdidas Serias
Marzo resultó ser un desafío para los mercados financieros. Algunos de los mayores fondos de cobertura macro en EE. UU. enfrentaron pérdidas sustanciales. Notablemente, Millennium reportó una pérdida de $900 millones solo de las operaciones de dos de sus equipos, mientras que el Master Fund de Brevan Howard ha caído un 5% desde el comienzo del año. Estos eventos llevaron a los gestores de fondos a implementar estrategias de gestión de riesgos más estrictas.
La caída en los mercados está obligando a los inversores a adoptar posiciones más cautelosas. Las salidas de instrumentos de inversión de alto riesgo están acelerándose, con las estrategias de cobertura tomando prothacenismo. Las altas tasas de interés y las presiones inflacionarias están aumentando la incertidumbre en los mercados, afectando negativamente el sentimiento general del mercado e intensificando la presión vendedora.
Las Tensiones Geopolíticas y las Guerras Comerciales se Intensifican
Además, las guerras comerciales globales han alcanzado una nueva dimensión. Las represalias económicas que comenzaron entre Canadá y China podrían expandirse aún más con la participación de la Unión Europea. El mayor riesgo se ve en los nuevos aranceles que EE. UU. podría implementar el 2 de abril, lo que podría ralentizar la economía global, lo que requiere precaución.
Los conflictos en curso en el Medio Oriente también están alimentando la incertidumbre en los mercados. Sin embargo, a pesar del aumento de las tensiones geopolíticas, los aumentos anticipados en los precios del petróleo no se han materializado, principalmente debido al aumento de la producción de petróleo en EE. UU. y las expectativas de una recesión económica global.
Los inversores están recurriendo a activos refugio como el oro en respuesta a los riesgos geopolíticos. El oro se destaca como un indicador clave de la percepción del riesgo en las circunstancias actuales.
El mercado de criptomonedas está experimentando fluctuaciones bruscas junto con los mercados globales. Mientras que Bitcoin (BTC) parece haber encontrado soporte en el nivel de $80,000, la fortaleza de este soporte sigue siendo incierta. La debilidad general en los mercados está empujando a los inversores a evitar riesgos, lo que genera preocupaciones de que este soporte podría romperse fácilmente durante desarrollos negativos.

Especialmente, la disminución en las operaciones apalancadas y las inversiones basadas en el impulso está aumentando la volatilidad de Bitcoin. En el entorno macroeconómico actual, no hay un catalizador claro para que la criptomoneda más grande realice un movimiento alcista fuerte. Esta negatividad, junto con los cambios de los inversores hacia inversiones más seguras para protegerse contra las incertidumbres a corto plazo, está aumentando la presión sobre los precios.