Microsoft, en un informe presentado a la SEC en julio, quiere que el gobierno federal vea su relación con OpenAI más como una situación de amigo y enemigo que como una verdadera asociación. En su informe periódico de rendimiento financiero y condiciones en el Formulario 10-K, Microsoft declaró a OpenAI como un competidor en varios pasajes, mientras que también mencionó a OpenAI como un socio estratégico múltiples veces a lo largo del documento.
Detalle Notable en el Informe
Curiosamente, Microsoft habla de docenas de competidores y una intensa competencia en todos los mercados en sus declaraciones sobre la competencia. Estos incluyen empresas que van desde Apple hasta Nintendo, así como varias organizaciones de software y codificación. Sin embargo, Redmond solo menciona al socio estratégico OpenAI a lo largo del documento.
Una revisión superficial reveló que la palabra socio, incluidas sus versiones en plural, aparece 72 veces. Entre estos, parece que Microsoft no nombra a ningún socio aparte de OpenAI. Aunque es poco probable que esto tenga un significado legal, es notable que la asociación estratégica entre OpenAI y Microsoft enfrenta investigaciones antimonopolio en el Reino Unido, EE. UU. y la UE.
La Relación Entre Microsoft y OpenAI
La relación entre Microsoft y OpenAI tenía todas las características de una gran adquisición tecnológica sin una compra real. En julio de 2019, Microsoft invirtió mil millones de dólares en OpenAI y se convirtió en su único proveedor de nube; esencialmente comprando los derechos para alojar ChatGPT años antes de su lanzamiento.
Cuando se lanzó ChatGPT, Microsoft invirtió otros 10 mil millones de dólares. Más tarde, Microsoft obtuvo acceso temprano y semi-exclusivo para aplicar GPT-4 a sus propios servicios Copilot y Bing, así como para realizar mejoras en los propios servicios de OpenAI.
En 2023, OpenAI experimentó un turbulento golpe de liderazgo con la breve destitución del CEO y cofundador Sam Altman y cambios en la junta directiva de la empresa. Mientras Altman estaba fuera, Microsoft prometió contratarlo a él y a otros empleados de OpenAI que fueron despedidos o que estaban dispuestos a irse y darles sus propias divisiones dentro de la empresa.
Altman finalmente regresó a su puesto al frente de OpenAI, y la junta se reestructuró para incluir un asiento de observador reservado para Microsoft. Ocho meses después, en julio de 2024, Microsoft renunció a este asiento en la junta, alegando que creía que el asiento de observador ya no era necesario.