Tras su victoria en las elecciones presidenciales, Donald Trump ha designado candidatos para tres puestos gubernamentales críticos: el Secretario del Tesoro, el Secretario de Comercio y el jefe de la Comisión de Bolsa y Valores (SEC). Estos nominados son reconocidos por sus actitudes favorables hacia las criptomonedas y su comprensión de la inevitable importancia de las monedas digitales.
DeFi y la Digitalización Podrían Acelerarse en el Segundo Mandato de Trump
Si se confirman estos nombramientos, el enfoque financiero de Estados Unidos podría experimentar cambios significativos. Según un informe de Matrixport del 29 de noviembre de 2024, la percepción de “Bitcoin como oro digital” podría evolucionar hacia una narrativa más amplia de un “Renacimiento DeFi”. Las finanzas descentralizadas (DeFi) y las tecnologías blockchain podrían integrarse en los sistemas financieros tradicionales, revolucionando potencialmente los procesos de phace y transacción. Este cambio no solo podría limitarse a EE. UU., sino que también podría acelerar la adopción de criptomonedas en otras naciones.
Scott Bessent, el nominado para Secretario del Tesoro, ha llamado la atención por sus declaraciones de apoyo respecto a Bitcoin. Además, el informe de Matrixport sugiere que es posible el establecimiento de una reserva nacional estratégica de Bitcoin por parte de EE. UU. Sin embargo, se anticipa que el país preferirá conservar su Bitcoin existente en lugar de venderlo, optando por un almacenamiento a largo plazo en lugar de un uso activo para nuevas adquisiciones.
Regulaciones Favorables a las Criptomonedas Están en Camino
Una de las consideraciones de Trump para el liderazgo de la SEC es el exmiembro de la SEC Paul Atkins, conocido por sus propuestas regulatorias equilibradas que apoyan el crecimiento del sector de las criptomonedas.
Los expertos enfatizan que estos pasos podrían facilitar una aceptación más amplia del ecosistema de criptomonedas en EE. UU. y acelerar el proceso de digitalización económica. A la luz de estos desarrollos, las acciones de EE. UU. respecto a las criptomonedas y las tecnologías blockchain indican una transformación significativa en el mundo financiero.