Nasdaq ha presentado una propuesta destinada a aclarar la definición de criptomonedas. La propuesta sugiere que las criptomonedas deben dividirse en cuatro categorías principales, lo que ayudaría a establecer claridad sobre qué organismo regulador es responsable de la supervisión. Esta iniciativa ha salido a la luz mientras se insta a las autoridades reguladoras en EE.UU. a centrarse más en el sector de las criptomonedas.
Agrupaciones Propuestas por Nasdaq
Según la recomendación de Nasdaq, las criptomonedas deberían clasificarse en cuatro grupos: valores financieros, contratos de inversión en criptomonedas, materias primas de criptomonedas y otras criptomonedas. Esta clasificación tiene como objetivo diferenciar entre los activos que se consideran valores según las definiciones actuales y los que no lo son. La propuesta enfatiza la necesidad de criterios claros para los contratos de inversión en criptomonedas, teniendo en cuenta las decisiones judiciales existentes.
La sugerencia incluye una distribución de responsabilidades entre la Comisión de Bolsa y Valores de EE.UU. (SEC) y la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas (CFTC). Se indica que la SEC supervisaría los valores de criptomonedas, mientras que la CFTC regularía las materias primas de criptomonedas. La propuesta indica que esta distribución de roles se aclarará si se introduce una nueva ley de criptomonedas.
Recomendaciones Regulatorias
Nasdaq destaca que su infraestructura de comercio respalda este tipo de activos, operando en seis continentes. Además, sugiere que se pueden implementar medidas adicionales para permitir que las plataformas de comercio relacionadas con criptomonedas monitoreen las actividades de los inversores de manera integral.
John Zecca afirma, “Las criptomonedas que se clasifican como valores deben operar en cumplimiento con las regulaciones de transacciones de mercado existentes.”
La carta de Nasdaq comparte la perspectiva de que el ecosistema actual del mercado de activos digitales puede hacerse más eficiente a través de una clasificación adecuada y ajustes regulatorios.
Las propuestas tienen como objetivo contribuir a las discusiones en torno al establecimiento de un marco regulatorio más completo para los activos digitales. Este enfoque puede verse como un paso hacia la reducción de incertidumbres para los participantes del mercado, fortaleciendo así los mecanismos regulatorios y de supervisión. En el futuro, se espera que las instituciones relevantes elaboren las propuestas y avancen hacia su implementación.