Coinbase, un destacado intercambio de criptomonedas con sede en los Estados Unidos, enfrenta una demanda colectiva iniciada por el inversor Brady Nessler. La demanda, presentada en el Tribunal del Distrito Este de Pensilvania, tiene como objetivo a individuos y entidades que adquirieron valores de Coinbase que se cotizan públicamente entre el 14 de abril de 2021 y el 14 de mayo de 2025.
Demanda contra Coinbase
Nessler y su equipo legal acusan a la subsidiaria de Coinbase, CB Payments Limited (CBPL), de declaraciones públicas engañosas. La Autoridad de Conducta Financiera (FCA) del Reino Unido impuso una multa de aproximadamente £3.5 millones ($4.5 millones) a CBPL el año pasado. Esta sanción se debió a la provisión de servicios de dinero electrónico a 13,416 clientes de alto riesgo. Tras esta notificación, las acciones de Coinbase experimentaron una caída de $13.52, lo que equivale a una disminución del 5.52% en el valor.
La penalización para CB Payments Limited surgió de la aceptación y servicio a usuarios de alto riesgo en su plataforma. Los funcionarios de la empresa reconocieron que esta multa llevó a críticas sobre los procesos de gestión de riesgos de la firma, lo que impulsó discusiones continuas sobre sus prácticas regulatorias.
Robo de Datos y Consecuencias Financieras
Otro problema significativo destacado en la demanda fue la reciente violación de datos de Coinbase. Los representantes de la empresa admitieron que algunos agentes de atención al cliente en el extranjero actuaron de manera inapropiada, lo que llevó a la copia de datos de menos del uno por ciento de sus usuarios mensuales. Según una presentación formal al Fiscal General de Maine, 69,461 individuos fueron afectados por este incidente.
Entre los datos robados se encontraban nombres, direcciones, números de teléfono, correos electrónicos, números de seguridad social parcialmente enmascarados y detalles de cuentas bancarias, algunos identificadores bancarios, imágenes de identidad gubernamentales, información de cuentas y datos corporativos limitados. Tras la exposición del incidente, la empresa recibió un correo electrónico exigiendo un rescate de $20 millones, que se negaron a pagar. La empresa anticipa gastar entre $180 millones y $400 millones en mejoras de seguridad y compensación a clientes.
Tras los informes de la violación de seguridad, las acciones de Coinbase cayeron más de un 7%, aunque pronto se recuperaron. Estas fluctuaciones financieras subrayan la importancia de la transparencia y la gestión oportuna de tales incidentes.
El Alcance y las Exigencias de la Demanda
La demanda presentada por Brady Nessler también nombra como acusados al CEO Brian Armstrong y a la Directora Financiera Alesia Haas. Nessler y sus representantes legales exigen la compensación de daños para todas las partes afectadas y buscan sanciones adicionales que el tribunal considere apropiadas.
Los abogados de Nessler argumentan que las declaraciones realizadas por la dirección de la empresa no fueron transparentes ni precisas. Tienen la intención de utilizar vías legales para cubrir posibles daños.
Estos recientes desarrollos destacan una necesidad urgente para Coinbase de mejorar su cumplimiento con las regulaciones y proteger los datos de los clientes. Para evitar problemas similares, se espera que la empresa refuerce significativamente sus procesos de auditoría interna.
Las demandas colectivas de esta naturaleza son comunes en el mundo de las criptomonedas y a menudo no llegan a una conclusión beneficiosa para casos anteriores. Tales demandas en los Estados Unidos son frecuentemente presentadas por individuos que reclaman daño por las acciones de grandes empresas y buscan compensación financiera.