Tether, el emisor de la mayor stablecoin por capitalización de mercado, USDT, ha tenido una influencia significativa en las caídas del mercado. Las preocupaciones en curso sobre el cumplimiento regulatorio se han reducido a medida que la empresa ha hecho mayores esfuerzos en esta área. Durante un evento reciente, el CEO de Tether, Paolo Ardoino, proporcionó información sobre el estado actual de las regulaciones.
Regulaciones de Criptomonedas en EE.UU.
Hablando en la DC Fintech Week en Washington, Ardoino expresó optimismo respecto al futuro de las regulaciones de criptomonedas en EE.UU. A pesar de los esfuerzos a lo largo de los años, el Senado aún no ha aprobado ninguna regulación sobre criptomonedas. Aunque el apoyo bipartidista al proyecto de ley actual ofrece esperanza, la agenda electoral política podría obstaculizar su progreso este año.
Ardoino enfatizó la importancia de implementar regulaciones sensatas para la protección del cliente. Declaró, “Como empresa, favorecemos las regulaciones, pero deben ayudar a proteger a los clientes.”
¿Qué sucede si las regulaciones no se implementan este año? El representante French Hill, quien lidera el panel de criptomonedas en el Comité de Servicios Financieros de la Cámara, mencionó que el tema podría convertirse en una prioridad en la próxima sesión de 2025.
Apoyo de Tether a las Fuerzas del Orden
Ardoino también discutió cómo Tether ayuda a las agencias de aplicación de la ley, incluyendo el FBI y el Servicio Secreto, en 45 países. Con millones de usuarios interactuando con USDT, los criminales a veces explotan este activo, pero la fuerte colaboración de Tether con las fuerzas del orden complica sus operaciones.
Reservas
Finalmente, Ardoino habló sobre las reservas y las capacidades de redención. Destacó que las redenciones rápidas representan riesgos significativos, especialmente cuando las reservas no están respaldadas por activos fácilmente líquidos. Señaló que en 2022, Tether logró sobrevivir a una redención masiva de miles de millones, habiendo liquidado más del 10% de sus reservas, indicando una prueba de estrés que muchos bancos no podrían soportar.