La presión regulatoria en EE.UU. ha obstaculizado significativamente la innovación para los entusiastas de las criptomonedas a lo largo de los años. Aunque las cosas comenzaron a cambiar con la presidencia de Trump, la realidad es que las regulaciones evolucionan gradualmente con el tiempo. En este contexto, el Acta GENIUS tiene una importancia considerable.
EE.UU. y Web3
EE.UU. ha sido cuna de numerosas innovaciones tecnológicas, confiando en gran medida en esta fortaleza. Su posición como un centro de innovación le ha permitido alcanzar su poder actual en la era de internet 2.0. La marca de teléfonos más grande del mundo, los gigantes de las redes sociales y los proveedores de infraestructura operan desde allí.
Sin embargo, cuando se trata de Web3, que significa la evolución continua de internet, EE.UU. ha quedado significativamente atrás. En 2023, la Unión Europea adoptó regulaciones integrales sobre criptomonedas. Estas regulaciones se han implementado en varios sectores. Durante años, China ha luchado por fortalecer su moneda digital local frente al dólar estadounidense. Los Emiratos Árabes Unidos están avanzando hacia convertirse en el centro global de Web3 con incentivos significativos. Durante la administración de Biden, EE.UU. simplemente observó estos desarrollos. No obstante, la innovación estadounidense, que dio origen a gigantes como Ripple y Solana, ahora debe crear el entorno necesario para su rápido crecimiento.
Legislación de Criptomonedas en EE.UU.
Los senadores Bill Hagerty, Cynthia Lummis y Tim Scott han anunciado el Acta de Orientación y Construcción de Innovación Nacional (GENIUS), que busca apoyo bipartidista y aborda las stablecoins. Esta legislación tiene como objetivo proteger a los consumidores imponiendo estrictos requisitos de reserva a los emisores de stablecoins, anclando efectivamente las monedas tokenizadas al dinero fiduciario, que es uno de los bloques de construcción fundamentales de Web3.
Uno de los pasos más cruciales que EE.UU. debe tomar para apoyar la innovación en criptomonedas es establecer un marco legal para las stablecoins. Esto también es vital para reforzar el papel global del dólar. La propuesta prohíbe la emisión de stablecoins algorítmicas, que experimentaron riesgos significativos, como se vio en el incidente de LUNA-UST.
Para abordar usos ilícitos, los emisores de stablecoins aprobados deberán cumplir con las regulaciones estadounidenses contra el lavado de dinero y sanciones. Esto también marcará un hito importante en la eliminación del FUD en torno a las stablecoins.
Finalmente, el proyecto de ley describe mecanismos y procedimientos de protección para los inversores en caso de quiebra de un emisor de stablecoins. En general, es probable que la propuesta obtenga apoyo bipartidista y elimine las incertidumbres relacionadas con las stablecoins mientras aún hay tiempo limitado.