El Fondo Monetario Internacional (FMI) acordó proporcionar un préstamo de $1.4 mil millones al gobierno de El Salvador. Este préstamo tiene como objetivo apoyar la agenda de reformas del país centroamericano, condicionado a la aprobación del Directorio Ejecutivo del FMI.
Préstamo como Forma de Incentivo
El dinero proporcionado por el FMI busca fortalecer el programa de reformas de El Salvador. Además, se espera que este préstamo facilite un total de $3.5 mil millones en financiamiento del Banco Mundial y otras instituciones financieras internacionales.
Según un comunicado de la agencia financiera de las Naciones Unidas, el gobierno de El Salvador acordó limitar sus esfuerzos en como parte del acuerdo. Las políticas reducirán significativamente los riesgos potenciales asociados con el proyecto Bitcoin. Las reformas legales harán que la aceptación de Bitcoin sea opcional para el sector privado, mientras que las actividades del sector público relacionadas con Bitcoin serán restringidas. Los impuestos solo se pagarán en dólares estadounidenses, y la participación del gobierno en la billetera Chivo se eliminará gradualmente.
Supervisión y Transparencia de Activos Digitales
La transparencia, regulación y supervisión de los activos digitales tienen como objetivo mejorar la estabilidad financiera, la protección del consumidor e inversor, y mantener la integridad financiera.
Este préstamo del FMI está destinado a apoyar las reformas económicas de El Salvador y fortalecer la estabilidad financiera del país. La aprobación del préstamo estará sujeta al consentimiento final del Directorio Ejecutivo del FMI.
Este acuerdo entre El Salvador y el FMI se destaca por las restricciones que impone a las políticas de criptomonedas. La decisión del gobierno de continuar con las compras de Bitcoin equilibra las condiciones establecidas por el FMI para el préstamo. Este desarrollo ilustra cómo el país dará forma a sus estrategias económicas y políticas de activos digitales.