El Partido Liberal Democrático (LDP) de Japón está avanzando hacia cambios significativos en las regulaciones de activos digitales. La propuesta tiene como objetivo definir los activos digitales como una clase de activos separada, con una reducción prevista del impuesto sobre las ganancias de capital al 20%.
Regulaciones de Activos Cripto
Bajo la propuesta del partido, los activos cripto se regularán como una nueva clase de activos, distinta de los valores. El plan también incluye aplicar el mismo tratamiento fiscal a los derivados de activos cripto que se aplica a las inversiones realizadas in situ. Además, se espera que la tributación de los intercambios entre activos se calcule colectivamente en el momento de convertir esos activos en efectivo.
Políticas y Enfoques del Gobierno
Históricamente, el gobierno japonés ha adoptado un enfoque cauteloso, manteniendo un rigor similar en las regulaciones relativas a las inversiones en activos cripto. Como parte de un paquete de estímulo económico aceptado en noviembre de 2024, se han propuesto discusiones sobre la reforma de la tributación de los activos cripto. Además, han surgido sugerencias de establecer una reserva estratégica de activos digitales por parte de los legisladores.
El legislador japonés Satoshi Hamada propuso convertir parte de las reservas de divisas extranjeras en activos cripto para crear una reserva estratégica. Esta evaluación ha generado discusiones sobre la competitividad internacional del país, aunque el Primer Ministro sigue siendo escéptico sobre la idea.
Primer Ministro Shigeru Ishiba: “Japón carece de información suficiente sobre el movimiento de activos cripto en EE. UU.”
La Agencia de Servicios Financieros ha decidido tomar medidas contra las empresas cripto que no cumplan con las regulaciones regionales. Esta decisión tiene como objetivo asegurar la transparencia y el orden en las transacciones de activos cripto.
Los esfuerzos regulatorios en curso tienen como objetivo reformular el enfoque de Japón hacia el mercado de activos digitales. Las discusiones sobre las propuestas de reforma continuarán hasta el 31 de marzo de 2025.