El OFAC del Departamento del Tesoro de EE. UU. ha impuesto sanciones a Behrouz Parsarad, el operador del mercado de criptomonedas Nemesis. Parsarad, un ciudadano iraní, supuestamente ganó comisiones por el comercio ilegal de productos en el ámbito digital. Las sanciones son el resultado de miles de millones de dólares en transacciones realizadas entre 2021 y 2024, atrayendo la atención internacional hacia la plataforma.
Restricciones y Operaciones
En marzo de 2024, las autoridades de EE. UU., Alemania y Lituania confiscaron servidores vinculados a Nemesis. Tras estas operaciones, se reveló que Parsarad estaba en conversaciones para establecer una nueva plataforma con antiguos vendedores. La plataforma albergaba a más de 30,000 usuarios activos y alrededor de 1,000 vendedores.
Declaraciones de Funcionarios
Durante las operaciones, también se incautaron billeteras de criptomonedas. OFAC señaló que Parsarad ganó millones de dólares con las transacciones.
Bradley T. Smith: “Como gerente del mercado digital Nemesis, su objetivo era crear un espacio seguro para la producción, venta y transporte de productos ilegales.”
Ari Redbord: “Nemesis albergaba no solo el comercio de ciertos productos prohibidos, sino también identificaciones falsas y herramientas de ciberataque.”
Las autoridades coordinaron con organizaciones como Europol, el BKA de Alemania y la NCA del Reino Unido para llevar a cabo extensas operaciones contra actividades criminales digitales. Estas acciones fueron parte de los esfuerzos de cooperación internacional.
Bajo las sanciones impuestas, se identificaron 44 direcciones de billeteras de Bitcoin y 5 de Monero. Aproximadamente $850,000 fueron transferidos desde las billeteras de Bitcoin identificadas, llevando el total con otros activos criptográficos de Parsarad a $1.6 millones.
Estas operaciones demuestran el uso efectivo de la tecnología blockchain en la lucha internacional contra las organizaciones criminales digitales. Los funcionarios expresaron que los avances tecnológicos permiten monitorear y desbaratar redes delictivas. Sin embargo, el creciente ingreso de los mercados digitales subraya el vasto alcance de estas actividades.