Las criptomonedas continúan enfrentando tiempos tumultuosos. El Departamento de Justicia de EE. UU. ha presentado cargos contra 18 individuos y empresas por manipulación. Bitfinex está a punto de recibir miles de millones en reembolsos, y las actas de la Reserva Federal indican advertencias de relajación cautelosa. Podemos examinar brevemente la agenda vertiginosa de las últimas horas, especialmente centrándonos en las preguntas dirigidas al presidente de la SEC, Gensler, hoy.
Presidente de la SEC y Consulta sobre Criptomonedas
El 9 de octubre, el presidente de la SEC se reunió con estudiantes de derecho. Durante una discusión en el Instituto de Gobernanza Corporativa y Finanzas de la Universidad de Nueva York, se le plantearon preguntas a Gensler sobre regulaciones que han estado vigentes durante más de 80 años, que buscan incluir a las criptomonedas.
La SEC se refiere a la prueba de Howey de un caso de la Corte Suprema de EE. UU. de 1946 para determinar si un activo es un contrato de inversión o un valor. Una pregunta clave planteada a Gensler fue;
“¿Deberíamos regular las criptomonedas tratando de aplicar un fallo de la Corte Suprema de los años 40?”
Gensler respondió;
“Esta es la ley de nuestro país y juré defenderla, pero también protege a los inversores. La esencia de las leyes de valores es un concepto fundamental: ustedes deciden en qué quieren invertir.”
Estrellas de Criptomonedas en Prisión
Gensler y su equipo han estado instando a las empresas de criptomonedas a registrarse en la agencia durante años. Sin embargo, debido a la falta de orientación, las empresas no están seguras de cómo proceder. La SEC solicita que contraten abogados, pero los abogados tampoco tienen claro el proceso. Sin un marco regulatorio claro para las empresas de criptomonedas, la única forma de cumplir parece ser evitar participar en el negocio de criptomonedas.
En respuesta a todas estas críticas, el presidente de la SEC comentó;
“Digo sinceramente, en 2022, las principales figuras en este campo están o en prisión o esperando extradición. El hecho de que a la gente no le guste la ley no significa que no haya una ley. Es poco probable que estas cosas sirvan como moneda. Necesitan demostrar su valor (utilidad) a través de la producción y el uso.”